Aprendiendo del Fracaso en el Liderazgo de Startups
En esta edición, exploramos el liderazgo en startups y la reinvención profesional a través de la experiencia de Federico Gómez, exVicepresidente y Director General de PayPal LATAM, quien dejó una carrera corporativa para enfrentar el caos, la desalineación y lecciones inesperadas en el mundo de las startups.
Esta historia se compartió primero en nuestra Newsletter del Instituto del Fracaso, donde cada mes difundimos una de las mejores historias de fracaso de nuestra comunidad global. Recibe estas historias antes que nadie —Suscríbete a Nuestro Newsletter Aquí.
Sobre Federico Gómez
Federico ha dedicado toda su carrera a operar y crecer compañías en el área de servicios financieros y Fintech. Es mentor de emprendedores y advisor de fondos de inversión. Su posición más reciente fue VP y Director General de PayPal LATAM.
Aprender del fracaso en el liderazgo de startups definió un punto clave en mi trayectoria profesional. Dejar un trabajo corporativo estable por una startup caótica cambió mi perspectiva sobre el liderazgo, las decisiones y el fracaso.
Definiendo el Fracaso
El Instituto del Fracaso: : ¿Cuál es tu definición personal de fracaso?
Federico: Para mí, el fracaso es no alcanzar las metas personales.
Por Qué Dejé un Trabajo Corporativo Global
Tomando el Riesgo: De AMEX a una Startup
Tras graduarme, comencé mi carrera en American Express en México. Participé en proyectos globales y me trasladé a Nueva York. Era una vida estable y llena de oportunidades.
Sin embargo, me atraía el ecosistema de startups. Cuando surgió una oferta en una startup en México, decidí arriesgarme. Dejé atrás una carrera global exitosa por impacto y crecimiento.
Quería un trabajo con propósito, la vida corporativa ya no me motivaba.
💩 El Verdadero Fracaso: Desalineación en el Liderazgo
Al principio, el entorno de startup era emocionante. Participé en rondas de inversión y desarrollé productos nuevos. Observé cómo una startup puede adaptarse rápidamente. Ayudábamos a comunidades a acceder a herramientas financieras.
Pero pronto llegó el aprendizaje del fracaso en el liderazgo.
Percibí una gran desalineación con el fundador y su estilo. Creo que el liderazgo debe ganarse, no imponerse. Aquí, era lo contrario. Perdimos el foco. Nos dispersamos sin orden ni prioridad.
Nunca investigué el historial del fundador ni la cultura de la empresa.
Cuando los Estilos de Liderazgo no se Alinean
Conflicto y Caos: El Punto de Inflexión
La señal clara llegó en una junta clave. Surgió un fuerte conflicto entre ejecutivos. Uno renunció en plena reunión. Fue evidente que el liderazgo estaba fracturado.
Había dejado todo y mudado a mi familia por esta oportunidad. Me sentí derrotado.
Afortunadamente, regresar a mi país, rodeado de mis seres queridos, me brindó el apoyo emocional que necesitaba para superar esta situación.
Salir Adelante y Seguir Creciendo
Reconstruirse y Reinventarse
Pese a la desalineación, aún disfrutaba trabajar con el equipo. No renuncié de inmediato. Empecé a buscar nuevas oportunidades.
Más tarde, acepté otro trabajo, y meses después PayPal me contactó para liderar un nuevo mercado. Mi experiencia en la startup fue clave para conseguirlo.
Lecciones del Fracaso en el Liderazgo de Startups
Si pudiera volver atrás, investigaría más. Buscaría referencias y entendería mejor los valores del equipo.
Aun así, no me arrepiento del riesgo. Aprendí lecciones que el mundo corporativo nunca me habría enseñado. Esas enseñanzas aún me acompañan.
En Conclusión…
Esta experiencia estuvo llena de giros inesperados, pero también de aprendizajes valiosos que siguen dando forma a mis decisiones profesionales. Reflexionar sobre el camino recorrido me ayudó a identificar las ideas que hoy aplico en cada nuevo rol y desafío.
No olvides:
Siempre investiga la cultura de la empresa, el estilo de liderazgo y quiénes son los fundadores antes de aceptar un nuevo puesto.
Salir de tu zona de confort puede traer resultados impredecibles, pero también un gran crecimiento personal y profesional.
Incluso después de los tropiezos, tus habilidades y experiencia siguen siendo activos valiosos que abren nuevas puertas.
Nunca es tarde para redirigir tu camino y encontrar oportunidades que se alineen con tus valores.
A veces, los fracasos más duros contienen las semillas de tu próxima gran oportunidad.
Fracasar en una startup me enseñó lecciones que nunca habría aprendido en un trabajo corporativo. La más importante: cada experiencia—buena o mala—te ayuda a crecer y avanzar.
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